Ropa slow para vivir mejor
Por @belubaldelomar
Según la ONG Redress de Hong Kong, en el mundo se generan 92 millones de toneladas de residuos textiles al año, y se estima que podría llegar a 148 millones hacia 2030, es decir 175 kg por persona. Necesitamos parar, ralentizar y consumir más lento, de manera más inteligente.
Estamos hablando de elegir prendas que formen parte de nuestra vida, piezas únicas que nos abracen con su comodidad. Hechas con amor por otras personas en condiciones laborales justas, con fibras naturales y mediante procesos que no contaminan. Las cuidamos porque con ellas vivimos historias maravillosas.
De eso se trata el nuevo consumo, éste es el nuevo lujo, elegir pocas prendas, cómodas, básicas, de calidad, combinables, que nos duren para siempre, o al menos unos años.
Elegimos 6 marcas que nos hacen soñar con que hay un camino que se hace cada vez más posible.
Filippa K
«Prendas diseñadas para durar» es el lema de esta marca escandinava con foco en el minimalismo, las materias primas de calidad y altos estándares de sustentabilidad.
Reformation
Sustentabilidad es el foco de esta marca que valora las condiciones de trabajo equitativas, tiene políticas de reducción de desperdicios, uso de agua y electricidad, y no utiliza sustancias contaminantes en el proceso de fabricación de sus prendas.
A Piece A Part
Piezas básicas, duraderas y versátiles, el lema de la marca es que puedas guardar todas tus prendas en un solo equipaje y combinarlas entre sí.
Rachel Comey
Es una escultora y diseñadora newyorkina que trabaja con materias primas locales y de manera artesanal. Muestra sus prendas en modelos de edades y cuerpos reales.
Chain
Es una marca sustentable y artesanal que surgió a partir del Semillero UBA. Sus valores están relacionados con la tierra, lo natural y lo local. En 2018, Vogue Talents lo eligió como uno de los siete diseñadores internacionales «The Next Green Talents» del Fashion Week de Milán.
Garcia Bello
Reconstrucción, upcycling y desperdicio cero. Desde Holanda, la argentina Juliana García Bello trabaja a base a telas donadas, y es una de las 10 finalistas del concurso de diseño sustentable Redress Design Award 2020.