El lado B de lxs músicxs
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El lado B de lxs músicxs

Por Maria Molina

¿Empezó la temporada de retiros voluntarios de artistas? Hace rato. Mientras la cultura pop idolatra la idea del “genio torturado”, la verdad es otra. “La crisis de salud mental que está aniquilando la vida de muchxs, hoy se debe en gran parte al poder que tienen las redes sociales sobre cualquiera que viva de la exposición pública”, dice Johan Svanberg, CEO de Record Union.

Hablamos de personas con inseguridades, fobias, miedos como cualquiera. Con la diferencia de que están 24 x 7 expuestos al feedback social. Para salir siempre ileso habría que ser un robot”, reconoce Tamsin Embleton, autora del manual Touring and Menthal Health, que se reparte en los vestuarios de las salas de conciertos del mundo.

La avalancha de este tipo de episodios no para:

Miley Cyrus confesó que está harta de las giras, que se siente sola por más que actúe frente a 100 mil personas. Y eso que Flowers rompió todos los records de escuchas.

Taylor Swift reflexiona en la biopic Miss Americana: “Cuando alcanzás el éxito muy joven, querés -o te exige la industria- gustar siempre; entonces cualquier comentario dañino te desmorona”.

La Joaqui anunció que se retira de los escenarios por un tiempo, eliminó el contenido de sus redes sociales diciendo que se debe a: “Motivos de estrés traumático”.

Billie Eilish le contó a CBS News sobre cómo su rápido ascenso la llevó a caer en depresión y tener pensamientos suicidas: “A veces lo que más deseás termina siendo una pesadilla. Los comentarios sobre mi cuerpo me llevaron a tener con él la relación más tóxica que te puedas imaginar”.

En el documental “Demi Lovato: Simply Complicated”, habla sobre lo difícil de lidiar con la depresión, los trastornos bipolar y alimentario, las adicciones. “Lucho día a día con mi mente. Creía que pedir ayuda era un signo de debilidad, sin embargo, es lo más fuerte que alguien puede hacer”.

Katy Perry le reveló a Vogue que sufrió de una gran depre después de que un material suyo no fue bien recibido por sus fans: “Mi corazón se rompió porque le di mucha validez a la reacción del público, que no reaccionó como esperaba”.

El 60% de lxs artistas sufre ansiedad, estrés y depresión, según la Fundación Help Musicians UK. Viajes eternos por ruta y en avión, horarios incompatibles con el descanso o la vida social, foco mediático: el lado B de lxs músicxs no tan es idílico como pensamos. “¿Cómo puede ser que sea exitosa y no tenga un amigx con quien compartirlo? Debería tener a alguien a quien poder llamar ahora”, reflexiona Taylor Swift. Ahí es cuando la soledad lleva a buscar la compañía en las redes. No se le puede adjudicar la culpa de todos los males a la vida digital, pero es un arma de doble filo: un día el nirvana, otro la decepción. Cada vez son más lxs artistxs que rompen el tabú que les impedía ser abiertos al tema y a las luchas que enfrentan a diario. Hoy hablan sobre sus experiencias y ayudan a crear consciencia.

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