MET Gala CAMP: masculinidades deconstruídas y artificio pop

Por Lucía Levy

@misslulevy

El evento más importante en el calendario fashion internacional es la Costume Institute Gala que se lleva a cabo en el Metropolitan Museum de Nueva York. Fundado en 1948 por la publicista de moda Eleanor Lambert, desde siempre el objetivo de esta fiesta es celebrar la apertura de la nueva exhibición y fomentar donaciones de la high society neoyorquina para el Costume Institute. Desde 1995 Anna Wintour está a cargo de la organización y elección de lxs invitadxs y la Gala es para ella una oportunidad más para demostrar y ejercer el poder que hoy tiene.

El tema de este año surge de un ensayo escrito en 1964 por la filósofa y escritora Susan Sontag. Bajo el nombre «Notes on Camp», Sontag define a lo Camp como «el amor por lo antinatural: lo artficial y lo exagerado, el triunfo de un estilo epiceno, sin género».  Y agrega: «lo Camp es (…) el amor a lo exagerado, lo off, el ser impropio de las cosas. El mejor ejemplo nos lo da el Art Nouveau, al ser el estilo Camp más característico». Andrew Bolton, el curador del Costume Institute, organizó la exhibición teniendo en cuenta la definición de Sontag porque lo cultural y político hoy tiene mucho que ver con estas definiciones. «Pensé que tendría mucha resonancia cultural», dijo a Vogue.

Tal como se lee en este artículo de Gatopardo, el borrador del postulado de 58 puntos de Sontag se llamaba originalmente Notas sobre homosexualidad, explica el biógrafo de Sontag, Benjamin Moser en una nota de la revista Town & Country. Allí afirma que si Sontag viviera, hubiera odiado esta Gala del MET. En su momento, varixs leyeron el ensayo como una codificación del gusto gay y en esta línea fue destrozado y celebrado al mismo tiempo. “Notes on Camp fue una amenaza para la supremacía heterosexual. (…) Mientras que lo Camp era resistencia”, escribió Benjamin Moser.

Este año, a Anna Wintour la secundaron Lady Gaga, Harry Styles, Serena Williams y Alessandro Michele como co-hosts. Styles y Michele llegaron juntos a la Pink Carpet, mientras que la Gaga hizo una performance de al menos 10 minutos en la que un grupo de bailarines la ayudaban a sacarse capas de ropa para luego quedar en ropa interior (aunque con medias de red, claro). Por su parte, Serena eligió un vestido Versace neón que acompañó con zapatillas Nike a tono.

Los hombres se destacaron como nunca, supieron jugar el juego y coquetearon con la ambigüedad. Jared Leto llegó a la Pink Carpet sosteniendo su propia cabeza, Darren Criss la rompió con su make up y su look onda arlequín y Ezra Miller fue el amo de la noche gracias a sus siete ojos. En el caso de las mujeres se distinguieron Celine Dion by Oscar de la Renta, Saoirse Ronan by Gucci y Lily Collins inspirada por Priscilla Presley en su boda con Elvis.