Manicure para todxs
Por María Molina.
Cada vez más hombres se pintan las uñas. Nada nuevo, como casi toda tendencia beauty tiene copyright egipcio y en los ´70 era statement de escenario. Bowie usaba una en verde en la época de Ziggy Stardust, las rayitas verticales negras de Steven Tyler fueron las más copiadas y el rojo Cobain es más célebre que el rosa Barbie. Así hasta hace un tiempo nos hicieron creer que el nail art era cosa de chicas o de artistas. Pues no bebus. Tres de cada 10 hombres usan laca de color, según la encuesta de Treatwell.
David Bowie.
Steven Tyler.
Hoy también lxs más entusiastas son artistas: A$AP Rocky ya puede hacer un tablero de Pinterest con sus looks y Drake pidió un tono rosa para la campaña de Nike. Jared Leto y J. Balvin exudan autoexpresión en las manos, Harry Styles no se separa de la nail artist Jenny Longworth y Machine Gun Kelly tiene su propia marca. “Famosos y no, ellos se las pintan desde hace siglos. Pero la reciente ubicuidad de la práctica sugiere que las manicuras masculinas están a punto de tener un momento cultural más importante”, según Christy Harmon, del NY Times.
Pero, ¿quiénes son los hombres que hoy se hacen las manos? ¿Los que van a trabajar, a llevar a los chicos al colegio y al gimnasio? ¿Qué pasaría si de pronto un funcionario público aparece un con un OPI naranja ardiente? Juan es un funcionario argentino que siempre las lleva pintadas. “No tener las uñas pintadas me resulta raro, empecé en la pandemia y reconozco que puede ser algo difícil para algunas personas, yo lo hago por una cuestión estética porque me agrada y lo vivo con total naturalidad.”
Consultado sobre la reacción que genera, asegura que en algunas oportunidades nota miradas, pero que responden más a los propios prejuicios de esas personas que quizás actúan así por miedo o poca empatía. “Igual termina siendo una cuestión anecdótica, como usar o no usar corbata, tener o no tener tatuaje, usar o no usar barba, no cambia ningún aspecto esencial de mi.”
Bad Bunny.
Para Gianni Versace: “Sólo los hombres ingeniosos se pintan las uñas”. Y claro, estaba mandando a pasarela a chicos con minifalda y dedos carmesí. Tampoco es un postulado de identidad para Al Pacino usar uñas Azul Klein ni tampoco para el re serio de Lars Eidinger, lucirlas en negro o fucsia. Por lo menos eso dijeron ellos a Vogue Business. “El esmalte es una posibilidad para los hombres de señalizar flexibilidad y apertura a cambios sociales. Y puede funcionar como una motivación, es una exaltación de la propia sexualidad a través de la ruptura de una regla, lo que es visto como valiente”, dice Olivia Reed, de Refinery 29.
Lo importante es que uno se sienta conforme con uno mismo, independientemente de lo que digan o piensen los demás y de alguna manera manifestar abiertamente el escepticismo sobre los límites absurdos que separan “lo masculino” de “lo femenino”.
