el tiro bajo
“Tiro bajo, me cansé de usarlo en mi adolescencia. Recuerdo lo complicado que era sentarte si andabas muy ajustada, era incómodo. Si apretaba mucho y no eras muy delgada, deformaba el cuerpo, y si eras muy flaquita se te veía la bombacha (y en esa época no estaba de moda). A veces se salían esos “rollitos”, pero no podíamos dejar de usar esos jeans tiro bajo… eran la moda y así funcionaba mi mentalidad de rebaño adolescente en los 90s. Ahora ya no pienso igual, que cada uno use lo que quiera en su cuerpo, que usen lo que las haga sentirse mejor. Lo que ya no banco es la mentalidad de rebaño”, la que opina es Anita Noseda, una de las principales estilistas del momento, que viste a íconos de la nueva generación como Emilia Mernes, Angela Torres, María Becerra y Khea.
Como pasa siempre en la moda, todo vuelve, y el tiro bajo dosmilero que impuso Britney Spears, vuelve de la mano de lxs principales diseñadores internacionales. En éstos días se popularizó en las redes con la hegemónica Nicole Kidman en la tapa con photoshop de Vanity Fair (un medio orientado a una generación muy prejuiciosa), y en el cuerpo más natural de Paloma Elsesser en la tapa de ID (una revista que entiende que las nuevas generaciones ya no se bancan opinar de lxs cuerpos y se muestran más naturales), ambas usando la misma pollerita tiro bajo de Miu Miu.
¿Esta bien, esta mal? el tema acá es cuánto nos afecta querer ser parte de la moda que quiere lucir como Tini o María Becerra. Realmente celebro que cada una se ponga lo que quiera, y ya no me afecta, porque ya no quiero parecerme a nadie, quiero ser yo, pero pensar así me llevó años. ¿Realmente la Gen Z lo piensa de esta manera? Creo que dos cosas empezaron a cambiar lentamente: por un lado lxs jóvenes tienen menos prejuicios, y por el otro en algunos medios empezamos a ver un poco más de diversidad de cuerpos, ¿pero es suficiente?
X Belu Baldelomar